Este día promueve la reflexión histórica, el diálogo intercultural y el reconocimiento y respeto por los pueblos originarios.
Reconocemos en nuestra historia independentista este espíritu. En diferentes momentos del proceso histórico de construcción de nuestra Nación, en diferentes batallas y enfrentamientos por la defensa de nuestra soberanía cómo pueblo, hemos tenido lideresas y líderes que han encarnado esa diversidad cultural. Es el caso de Juana Azurduy, amazona altoperuana, y María Remedios del Valle, afrodescendiente bautizada como madre de la Patria, ambas con heróico desempeño en el Ejército del Norte. También el conocido Sargento Juan Bautista Cabral, con total entrega en la Batalla de San Lorenzo, y el Comandante Andresito, caudillo del actual territorio misionero, ambos de ascendencia guaraní.
Fue en 2010 que se modificó la denominación de este día al “Día del Respeto a la Diversidad Cultural”, mediante el Decreto N° 1584/10. Esta decisión resultó relevante ya que el modo de nombrar modifica la mirada sobre lo nombrado. Este cambio de paradigma implicó dejar atrás la conmemoración de “la conquista” de América, teniendo en cuenta que anteriormente era denominado como “Día de la Raza”, para dar paso al análisis y a la valoración de la inmensa variedad de culturas que han aportado y aportan a la construcción de nuestra identidad.
Recordamos este día con el objetivo de construir una mirada crítica que nos permita desnaturalizar discursos y prácticas arraigadas en nuestra historia para dar paso a la pluralidad de narrativas e identidades y a su valoración.
El Día del Respeto a la Diversidad Cultural propone el diálogo intercultural. La educación intercultural propicia encuentro entre distintas culturas que se reconocen y se tratan como iguales sin jerarquías, una respuesta necesaria para repensar nuestra nuestra identidad desde la inclusión y la soberanía.
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