En la Universidad de la Defensa Nacional (UNDEF) se desarrolló una jornada de análisis sobre la causa Malvinas. El encuentro, realizado en el Salón Brown del Rectorado, propuso una reflexión académica sobre los fundamentos históricos, jurídicos y estratégicos que sostienen el reclamo argentino por la soberanía en el Atlántico Sur.
A lo largo de la jornada se sucedieron las exposiciones de especialistas y Veteranos de Guerra, en un espacio dedicado a la memoria y la reafirmación de la soberanía argentina en las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur.
La jornada inició con la presentación del Capitán (R) VGM Héctor Tessey, quien propuso un recorrido por los principales argumentos históricos y jurídicos que respaldan la posición argentina.
Tessey, docente de las cátedras de Mando y Liderazgo en el Colegio Militar de la Nación e investigador de la Universidad, recordó que la soberanía española sobre las islas estuvo reconocida por tratados internacionales como Tordesillas (1494) y Utrecht (1713), y que la Argentina heredó esos derechos tras su independencia conforme al principio de uti possidetis iuris. Subrayó que entre 1820 y 1833 el país ejerció actos de soberanía efectiva, hasta la ocupación británica, calificada como ilegítima y contraria al derecho internacional.
En la reconstrucción de los argumentos argentinos, Tessey destacó el peso jurídico de la Resolución 2065 de la ONU (1965), que reconoce explícitamente la disputa de soberanía entre Argentina y el Reino Unido sobre las Islas Malvinas y exhorta a una solución negociada, excluyendo la aplicación del principio de autodeterminación al considerar a la población isleña como una comunidad implantada tras la ocupación británica de 1833. Este instrumento legal –según afirmó- establece que el caso debe resolverse bajo los principios de integridad territorial y descolonización, no como un ejercicio de autodeterminación, posición reforzada por jurisprudencia internacional de la Corte Internacional de Justicia. El análisis subrayó cómo este marco normativo obliga al Reino Unido a negociar de buena fe, deslegitimando su actual postura de condicionar el diálogo al consentimiento de los habitantes británicos instalados en el territorio en disputa.
Al cerrar, Tessey enfatizó la necesidad de mantener una estrategia integral basada en cuatro pilares: diplomacia, derecho, desarrollo económico y defensa. «Este no es un tema del pasado, sino una cuestión vigente que requiere continuidad más allá de los gobiernos de turno«, concluyó.
En continuidad con el análisis jurídico, el Contraalmirante (R) VGM Ricardo Alessandrini analizó la importancia estratégica de las islas para el Reino Unido, en función de su proyección hacia el Atlántico Sur y la Antártida.
Desde su experiencia como Jefe de armas del submarino ARA San Luis durante el conflicto de 1982, compartió aspectos inéditos de las operaciones navales, subrayando la centralidad del control marítimo: «La batalla demostró que, sin capacidades militares sostenibles, la diplomacia pierde peso«, es decir, la fuerza militar respalda el peso diplomático en un conflicto de soberanía, pero, a pesar de la guerra, el estatus jurídico de la disputa no cambió, pues la ONU sigue considerando el conflicto un tema de descolonización pendiente.
Alessandrini señaló que la presencia militar británica excede los intereses locales de los ocupantes de las islas y responde a objetivos geoestratégicos más amplios. Recordó las negociaciones fallidas del Memorándum de Entendimiento de 1967 y analizó el reciente caso del archipiélago de Chagos, donde el Reino Unido aceptó negociar su descolonización. Este antecedente, consideró, podría abrir una puerta para nuevas estrategias diplomáticas en el caso Malvinas. El Archipiélago de Chagos, ubicado en el Océano Índico, es una disputa territorial de larga data entre el Reino Unido y Mauricio. En 1965, el Reino Unido separó las Islas Chagos del territorio de Mauricio, que entonces se encontraba bajo dominio colonial de Gran Bretaña, y las declaró un territorio británico de ultramar. Posteriormente, en 1967, el Reino Unido estableció una base militar en Diego García, una de las islas más grandes del archipiélago, que fue arrendada a los Estados Unidos. La importancia del caso de Chagos para Argentina, según expuso Alessandrini, radica en el paralelismo que presenta con la cuestión de las Islas Malvinas. En 2019, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) dictó una opinión consultiva en la que reconoció la descolonización incompleta de Mauricio, instando al Reino Unido a descolonizar el archipiélago de Chagos y devolverlo a Mauricio, un proceso que aún está en marcha.
Como cierre, presentó un perfil actualizado de las islas basado en el censo británico de 2021: una población de 3.142 habitantes, con 51% de origen británico y fuerte presencia militar —1.300 efectivos en la base Monte Agradable. Criticó además la separación administrativa de Georgias y Sandwich del Sur en 1985 como una maniobra para fragmentar el conflicto, y señaló que la economía isleña se sostiene en licencias pesqueras ilegítimas, turismo y exploración petrolera.
El Coronel (R) VGM Esteban Vilgré Lamadrid analizó las experiencias de liderazgo en la Guerra de Malvinas, destacando que la responsabilidad, la solidaridad y la resiliencia fueron valores centrales entre los combatientes. Subrayó la importancia de los liderazgos éticos y cohesionados en situaciones críticas, señalando que los liderazgos efectivos se evidencian en resultados concretos, cohesión grupal y claridad de objetivos. Además, abordó las dificultades de liderazgo en combate, explicando cómo factores internos como rivalidades y tensiones personales pueden afectar la moral y eficiencia operativa, e invitó a pensar el liderazgo militar desde una perspectiva profesional, ética y al servicio del interés nacional.
En una exposición más próxima a los aspectos operativos de la Guerra, El Capitán (R) VGM Luis “Tucu” Cervera, veterano del Grupo 5 de Caza de la Fuerza Aérea Argentina, repasó el despliegue aéreo para sostener las operaciones durante el conflicto, destacando la movilización de los diferentes escuadrones y el rol clave de la logística. “En el Grupo V de Caza éramos 34 pilotos, 10 fueron derribados (9 de ellos fallecieron). Las operaciones eran de altísimo riesgo porque íbamos al núcleo de la flota, directo al poder de fuego de Inglaterra”.
Cervera también puntualizó que cada escuadrón vivió una experiencia distinta y que su relato se centraba en el accionar del Grupo 5, ya que era lo que conocía de primera mano. Cerró su exposición con la proyección de un video que sintetizaba el entrenamiento, el despliegue y las acciones del grupo durante la guerra, rindiendo homenaje a los pilotos caídos en combate.
La última ponencia estuvo a cargo del Coronel (R)VGM Dr. Daniel Esteban, actual secretario de Ciencia, Tecnología e Innovación de la UNDEF, quien presentó un análisis de escenarios estratégicos posibles para avanzar en la recuperación de la soberanía: el fortalecimiento del reclamo diplomático-multilateral en organismos internacionales; la exploración de instancias de negociación bilateral con incentivos de cooperación técnica y económica; la consolidación de alianzas regionales y la proyección geoestratégica en el Atlántico Sur y la Antártida; y, por último, el escenario militar, explícitamente desaconsejado por su inviabilidad política, jurídica y humanitaria.
El análisis propuesto por el Dr. Esteban partió de una reflexión sobre el deterioro de la posición negociadora argentina luego de la Guerra de Malvinas, agravado por acusaciones de violaciones a derechos humanos y el fracaso del TIAR. Sin embargo, destacó que en los últimos años se ha producido una revalorización social de los veteranos de guerra. La evaluación de la situación actual incluyó un diagnóstico sobre las asimetrías de poder: mientras Reino Unido mantiene una importante presencia militar en las islas, Argentina carece aún de capacidades disuasivas suficientes. Los panelistas subrayaron que cualquier estrategia viable debe contemplar el fortalecimiento integral del país -económico, diplomático y defensivo- como requisito previo para mejorar su posición negociadora.
Esteban enfatizó que cualquier estrategia debe respetar el derecho internacional, la Constitución Nacional y apoyarse en herramientas de diplomacia científica, ambiental y cultural, que hoy ofrecen un canal legítimo y creciente para reforzar la posición argentina. Planteó que la recuperación de Malvinas exige estrategias sostenidas en el tiempo, respetuosas del derecho internacional y del mandato constitucional.
Para finalizar, recordó a los caídos: «Cuando olvidamos a nuestros héroes, los matamos por segunda vez«.
La jornada logró equilibrar el análisis estratégico con la memoria histórica, ofreciendo un espacio de reflexión profesional a estudiantes de la UNDEF, miembros de la sociedad civil y autoridades civiles y militares de la UNDEF y el Ministerio de Defensa.
El cierre de la jornada estuvo a cargo del Rector de la UNDEF, Dr. Julio César Spota, quien destacó la importancia de sostener el reclamo de soberanía como una política de Estado transgeneracional, comprometida con los valores democráticos, el respeto al derecho internacional y la proyección estratégica de los intereses nacionales en el Atlántico Sur. «Malvinas es una causa que nos mancomuna, no es sólo un dolor compartido sino un anhelo colectivo que nos trasciende», concluyó.
Durante la jornada, se entregaron reconocimientos a los Veteranos que expusieron, como muestra de agradecimiento por su valiosa contribución. También se exhibió la muestra fotográfica Malvinas: cuatro viajes, de Rafael Wollmann, basada en el libro homónimo. Las láminas fueron prestadas especialmente para el evento por la editorial TAEDA, lo que permitió sumar una mirada visual y reflexiva sobre el conflicto. Además, se contó con la participación del Regimiento de Infantería 1 Patricios, cuyos soldados realizaron la guardia de honor a la entrada del evento e interpretaron el tradicional minuto de silencio en homenaje a los caídos en la Guerra de Malvinas.
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